YPF dejará Santa Cruz en febrero y ofrece retiros voluntarios para 2.500 operarios
La salida de YPF implica un recorte masivo de personal en el norte de Santa Cruz. La operadora estatal ofrece pagar una indemnización especial del 120% hasta el 31 de enero a unos 2.500 trabajadores y luego una indemnización al 100% en febrero. La empresa de combustibles CGC, vinculada a los Eurnekian, tomará el control administrativo con una dotación reducida a la mitad. Incertidumbre por el futuro de los petroleros en la región.
La decisión de YPF de abandonar su operación en el flanco norte de Santa Cruz ya es oficial y está generando un impacto significativo en el plano laboral. Con una transición que culminará el 28 de febrero, la empresa puso en marcha un programa de retiros voluntarios para unos 2.500 operarios, con el objetivo de reducir más del 50% de la dotación en esa región y la administración de la operación en manos de CGC.
Previo a esto, la compañía estatal ofrece una indemnización especial del 120% hasta el 31 de enero, que se reducirá al 100% durante febrero. Además, aquellos trabajadores que cumplan con los requisitos para jubilarse recibirán 13 sueldos y un bono adicional del 20% correspondiente al primer mes del año.
El retiro de YPF afecta tanto a los trabajadores directos como a los de empresas tercerizadas de perforación, que tampoco continuarán en la nueva etapa. Según un delegado del sector, “CGC no operará directamente, sino que administrará” los yacimientos, delegando parte de la operación a otras empresas como Crown Point, Roch y PECOM. Este esquema no contempla el uso de equipos perforadores en un inicio, lo que disminuye aún más la demanda de personal.
Si bien no habrá despidos compulsivos en esta etapa, las garantías de continuidad laboral para los operarios que no adhieran a los retiros son inciertas a partir del 1 de marzo, según indicaron los nuevos operadores. Esta decisión responde a la necesidad de optimizar yacimientos de alta madurez, con crecientes volúmenes de agua de formación que elevan los costos de producción.
La medida fue comunicada al gobernador de Santa Cruz, Claudio Vidal, y a los líderes sindicales Rafael Güenchenen y José Lludgar. Sin embargo, las definiciones sobre la continuidad laboral se manejaron con hermetismo, intentando evitar una mayor conflictividad. En audios que circularon tras las asambleas gremiales, se informó que los nuevos operadores dejarán fuera a una gran parte del personal actual.
En este contexto, el ministro provincial Jaime Álvarez confirmó que CGC asumirá la operación, aunque la redistribución de los bloques entre diferentes empresas podría modificar el panorama laboral y operacional en los próximos meses.
Mientras los retiros voluntarios avanzan, crece la preocupación entre los operarios que no están en condiciones de acogerse a estas opciones. La posibilidad de despidos masivos o precarización laboral a partir de marzo genera incertidumbre en las familias afectadas, que representan una porción importante de la economía regional.
Con la salida de YPF, Santa Cruz enfrenta una transformación profunda en el sector hidrocarburífero, que se verá marcada por una reconfiguración de las empresas y una reducción significativa del empleo en una de las actividades más relevantes para la provincia.
Fuente: infogremiales.- Foto ilustrativa TELAM .-
