El fotógrafo Pablo Grillo se convierte en un símbolo de la represión de Milei y Bullrich
Se suman protestas y pedidos de justicia por el fotógrafo que lucha por su vida luego de recibir un disparo de la Policía de Bullrich.
El fotógrafo Pablo Grillo, víctima de la brutal represión contra la marcha de jubilados e hinchas al Congreso, empezó a convertirse en un símbolo que atraviesa a todas las organizaciones políticas y sociales que se oponen a Javier Milei pero también permeó hasta las tribunas en los estadios de fútbol y la Iglesia.
Mientras el joven permanece internado y en estado reservado en el Hospital Ramos Mejía, la reconstrucción del momento en que la Gendarmería dispara con alevosia a la cabeza del reportero gráfico que estaba sacando fotos y a más de cien metros de los uniformados, ya circula por los medios masivos del país y del mundo, además de las redes sociales.
Hasta el prestigioso diario inglés The Guardian dedicó esta semana un importante despliegue periodístico en un artículo que cuenta que «un fotógrafo está en coma en Argentina tras la represión policial» de una marcha de jubilados. Así el relato de la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, comienza a desmoronarse.
La ministra de Seguridad había dicho que «el disparo lo que hizo fue rebotar, no sabemos si en el piso o una estructura metálica», cuando los videos y las imágenes comprueban que, por la trayectoria del proyectil, el agente que disparó había apuntado de forma horizontal, una práctica prohibida por organismos internacionales.
Bullrich tiene un largo historial de montar escenarios en base a mentiras y denuncias falsas, cuando algunos de sus operativos de seguridad terminan en violencia descontrolada de las fuerzas. Este viernes presentó una denuncia contra los intendentes peronistas Federico Otermina y Fernando Espinoza, sin ninguna prueba. Una chapucería que se extiende a los detenidos en la marcha, sin procedimientos ni elementos de prueba, lo que obligó a la jueza a liberarlos. Un modur operandi que ya es marca registrada de la ministra.
El video cuadro por cuadro de La Nación confirma que la ministra Bullrich mintió cuando dijo que «el disparo lo que hizo fue rebotar, no sabemos si en el piso o una estructura metálica». En las imágenes se ve claro como los gendarmes apuntan a Pablo Grillo y disparan el cartucho de gas de forma horizontal, algo prohibido por organismos internacionales.
Tanto Clarín como La Nación publicaron notas que contradicen a Bullrich: en el primer caso, se basan en el video registrado por un drone de TN pero en el segundo, además de la pieza del canal de noticias, se incluye una secuencia cuadro por cuadro del recorrido del disparo, demostrando que el gobierno mintió cuando instaló la versión de que el agente disparó a 45 grados.
Por eso, la ONU manifestó su preocupación por la salud de Grillo, y reclamó una investigación para determinar el «uso indiscriminado de la fuerza» por parte de la Policía. «Muchas eran personas de edad avanzada», advirtió en su pronunciamiento. En las redes está lleno de videos donde se ve a la policía de Bullrich rociando gas sobre el rostro de jubilados de edad avanzada, que estaban simplemente parados en la vereda.

Organizaciones sindicales y políticas ya están convocando a una marcha multitudinaria para el miércoles próximo junto a los jubilados en el Congreso, pero la condena social se extiende más allá. Este viernes por la noche, la hinchada de Argentinos Juniors llegó a corear un cantito de tribuna que parece marcar cierto agotamiento de la paciencia en Argentina: «Patricia Bullrich, la puta que te parió». Horas antes en la cancha de All Boys, los cantos fueron contra Milei. De hecho, la ministra intentó instalar que a la marcha fueros las barras y hasta periodistas especializados como Juan Pablo Varsky y Gustavo Gravia la desmintieron.
La canción solo contiene esa frase pero remite a una idéntica que, entre febrero y marzo de 2018, las hinchadas del fútbol argentino y la gente en los recitales habían empezado a corear contra Mauricio Macri. «Así empezó contra Mauricio», recordó un diputado del PRO ante LPO.
Igual que ahora, en ese momento el gobierno de Cambiemos se apuraba a conseguir un acuerdo con el FMI. El resto es historia conocida.
La hinchada de Argentinos Juniors coreó un cantito que parece marcar un agotamiento de la paciencia en Argentina: «Patricia Bullrich, la puta que te parió». La canción solo contiene esa frase pero remite a una idéntica que, entre febrero y marzo de 2018, las hinchadas del fútbol argentino y la gente en los recitales empezaron a corear contra Macri.
En ese clima se expanden las movilizaciones autoconvocadas en reclamo de justicia para Grillo. Este viernes, familiares, amigos y vecinos de Pablo protagonizaron un semaforazo en Lanús, distrito donde vive el joven atacado por los uniformados de Bullrich. También el cura Toto De Vedia ofició una misa para pedir por la salud del fotógrafo. Tambiés se movilizaron colegas de Grillo en La Plata y frente al Congreso Nacional.
La política de reprimir con ultra violencia de Bullrich, también está generando preocupación en los sectores más razonables de las fuerzas de seguridad. Es que la orden que reprimir a mansalva, por fuera de los protocolos que garantizan derechos de los ciudadanos frente al monopolio de la violencia del Estado, suelen terminar -tarde o temprano- con los policías condenados, un dato que la ministra elude.
Así pasó con los responsables de la muerte de Rafael Nahuel en 2017, cuando Bullrich también era ministra, y lo mismo ocurrió con Darío Poblete, el policía neuquino que mató por la nuca al docente Carlos Fuentealba el 4 de abril de 2007, también con un cartuchazo de gas lacrimógeno.
lpo