¿Cuánta agua beber diariamente según tu edad y condición?
Es común creer que todas las personas deben tomar al menos de 1.5 a 2L de agua al día. Sin embargo, los seres humanos requieren de distintas cantidades de agua según su edad y condición. Por ejemplo, una mujer lactante o embarazada necesita aún más agua que el promedio recomendado usualmente; un niño mayor a 9 años, también.
Hidratación en las mujeres embarazadas
Las mujeres embarazadas deben tomar de 2.5 a 3L de agua al día. Lo anterior porque experimentan una retención de agua y sodio considerable. En el caso de la madre lactante, esta debe tomar 3L diarios, según recomendaciones de la National Academy of Sciences (NAS). En una mujer embarazada, la correcta hidratación ayuda a mantener el aumento del volumen plasmático, favorece el flujo sanguíneo y ganancia de peso fetal, previene infecciones urinarias, formación de cálculos, deshidratación de gestantes con vómitos y mejora la pirosis (sensación de dolor o quemazón en el esófago).
Hidratación en los niños
Los niños suelen ser más vulnerables a los trastornos de temperatura porque su piel es más delgada, lo que facilita la eliminación de agua. Estar bien hidratado es crucial para un niño, pues esto influye en sus capacidades cognitivas. Un niño de 4 a 8 años deberá beber 1.5L por día, mientras que uno de 9 a 13 años deberá ingerir hasta 2.4L. A un niño deben proporcionársele líquidos incluso aunque no experimente sed.
Si eres un padre o tienes niños a tu cargo, puedes mantenerlos hidratados con distintos líquidos como sopas, gelatinas, jugos o frutas y verduras (recuerda que los líquidos que beban deben prescindir de grandes cantidades de azúcar).
Hidratación en los adultos
Muchas veces los adultos que están deshidratados no tienen conciencia de ello porque no tienen sed; sin embargo, de una manera prolongada, esta condición puede desembocar en enfermedades. Los adultos deben estar muy atentos a los síntomas de la deshidratación, como sequedad de mucosas, constipación, ¡disminución del apetito, agitación, orina concentrada y tolerancia al calor.
En la edad adulta lo recomendable es ingerir 1.5L diarios extras a los líquidos provenientes del alimento. Entre las ventajas de estar bien hidratado en la edad adulta están la disminución de las infecciones urinarias y virales como la gripe o la influenza; se mejora la digestión y se previene el estreñimiento, se lubrican las articulaciones y se previenen calambres, y se disminuye la producción de cálculos o piedras en el riñón.
ECOOSFERA.- FOTO REDES.