Extraño giro de Luis Caputo: se reúne hoy el FMI y Gobierno habilitaría suba del dólar y tasas aún más altas
En línea con lo que pide el Fondo Monetario, el ministro Luis Caputo deja correr el dólar, sube la tasa de interés y reúne dólares vía el Tesoro. Piden cambios en las metas
En las próximas horas, el directorio del Fondo Monetario Internacional (FMI) se reunirá para aprobar el acuerdo a nivel staff con Argentina, desatando un desembolso de u$s2.000 millones que el Gobierno espera con urgencia para apuntalar las finanzas públicas.
Esta decisión, programada para hoy jueves, llega en un momento de inflexión, marcado por un giro estratégico del Ejecutivo que combina la flexibilización del tipo de cambio, el aumento de tasas de interés y la compra de reservas por parte del Tesoro. La reunión, cargada de expectativas en los mercados, será un test para evaluar si este cambio de rumbo logra consolidar la confianza internacional y la baja del riesgo país, mientras las reservas del Banco Central siguen bajo presión en un año electoral. Así, el Gobierno ha ejecutado un cambio en su política con el organismo y los mercados, mostrando disposición para alinearse con las directivas del FMI.
En los últimos días, Milei ha permitido que el tipo de cambio oficial supere los $1.300, rompiendo una nueva marca -en lo inmediato- con un deslizamiento más pronunciado, una decisión que refleja un ajuste hacia un dólar más competitivo, en sintonía con las expectativas del organismo multilateral. Este movimiento, interpretado como una respuesta a la demanda de divisas -y a un crítico informe del FMI en la previa-, contrasta con la postura inicial de control estricto, sugiriendo una estrategia pragmática para evitar tensiones cambiarias adicionales antes de las elecciones legislativas de octubre.

El Gobierno y la ansiedad por los dólares del FMI.Imagen creada con inteligencia artificial
Sin embargo, el cumplimiento de las metas de reservas sigue siendo un punto de resistencia de corto plazo. El Ejecutivo ha reconocido implícitamente la dificultad de alcanzar los objetivos establecidos, abriendo negociaciones para ajustar las metas de acumulación, especialmente para septiembre, donde los niveles proyectados de u$s9.000 millones parecen inalcanzables. Al mismo tiempo, y en lo que es un extraño giro por parte del Palacio de Hacienda, el Tesoro comenzó a sumar dólares por encima de los u$s1.000 millones, en la intención de comenzar a «hacer los deberes» con el organismo, mostrando voluntad política a cambio de mayores plazos y menores montos en la meta de reservas. Este desvío, combinado con el volantazo económico, indica que Milei prioriza la estabilidad preelectoral por sobre el estricto apego a las exigencias del FMI, apostando a que los u$s2.000 millones actúen como un respaldo financiero mientras se redefine la estrategia de reservas.
Subir la tasa por pedido del FMI y el mercado
Un pilar de este giro ha sido el aumento de la tasa de referencia de interés en las licitaciones, que escaló a un nivel récord del 65% anual, reflejando la urgencia del Tesoro por captar fondos. En la última licitación, se colocaron aproximadamente $9 billones en letras y bonos, cubriendo solo un 76% de los más de $11 billones en vencimientos, dejando un excedente de liquidez –calculado en u$s1.000 millones– que podría presionar al dólar. Esta tasa elevada busca contener las expectativas de devaluación y sostener el «carry trade», alineándose con las directivas del FMI, aunque el costo financiero para el Estado se ha disparado, marcando un cambio drástico en la política monetaria.
Paralelamente, según señaló el Gobierno, el Tesoro ha iniciado una compra de reservas, un movimiento que complementa el desembolso esperado del FMI y busca fortalecer la posición externa del país. Esta decisión, que implica la intervención en el mercado de divisas para adquirir dólares, representa un giro respecto a la postura inicial de no emitir pesos para comprar divisas, sugiriendo que Milei busca acumular un colchón de liquidez ante la vulnerabilidad de las reservas.
En la Casa Rosada piensan que los u$s2.000 millones, pendientes de aprobación, serán un respaldo clave para sostener esta estrategia, enviando una señal de confianza a los inversores en un contexto de creciente incertidumbre. La flexibilización del tipo de cambio ha generado un impacto inmediato, con el dólar oficial aproximándose al límite superior de la banda de flotación que hoy supera los $1.400.
Evitar el «pass through», el desafío
En el Gobierno piensan que este ajuste podría derivar en presiones inflacionarias si no se controla adecuadamente. El aumento de la tasa al 65% anual, implementado en la licitación más reciente, busca mitigar estas expectativas, aunque la colocación parcial de deuda indica que el mercado sigue exigiendo condiciones más atractivas, un desafío que el volantazo de Milei intenta abordar con el apoyo del FMI. El alza de la tasa al 65% anual en la licitación reciente, que renovó $9 billones de un total de $11 billones en vencimientos, deja un saldo de $2 billones sin absorber, un indicio de la cautela de los inversores al margen de las nuevas exigencias de encajes. Esta medida, alineada con las expectativas del FMI de reducir la inflación, ha permitido captar fondos a corto plazo, pero el costo elevado para el Tesoro podría limitar su sostenibilidad.
El Gobierno parece confiar en que el desembolso de u$s2.000 millones compensará estas tensiones, aunque la efectividad dependerá de la coordinación entre la compra de reservas y el manejo de la liquidez. La modificación de las metas de reservas refleja un reconocimiento de las limitaciones estructurales para acumular divisas, con el Banco Central optando por una estrategia de no intervención que ha permitido al tipo de cambio ajustarse. La compra de reservas por parte del Tesoro, un elemento nuevo en este volantazo, sugiere una intención de mitigar esta debilidad, aunque la falta de un plan claro para septiembre genera escepticismo. Este enfoque flexible, respaldado por el aumento de la tasa al 65% anual, indica una disposición a ceder en las metas de reservas para asegurar el desembolso del FMI.
ámbito