Funciona 24/7 y hace el café como un experto: así es el primer robot barista hecho en la Argentina
La propuesta combina precisión, eficiencia y tecnología con una experiencia que despierta curiosidad y asombro.
Una persona se acerca a una pantalla, elige su bebida con un par de toques, paga digitalmente y observa cómo dosbrazos robóticos entran en acción. Muelen los granos, emulsionan la leche, preparan el café y hasta dibujan un corazón de espuma en la superficie de la bebida antes de entregar el pedido en mano. Todo sin intervención humana.
La escena, aunque parezca salida de una película de ciencia ficción, es realidad y describe el funcionamiento de BotMy Coffee, el primer robot barista 100% autónomo de Latinoamérica, una propuesta que combina precisión, eficiencia y tecnología con una experiencia que despierta curiosidad y asombro.
A simple vista parece una máquina más, pero por dentro coordina una compleja coreografía tecnológica: usa cafeteras, molinillos y espumadores profesionales, los mismos que un barista humano, y los maneja con precisión quirúrgica.

El sistema fue desarrollado por la startup argentina BotMy Solutions SRL y está diseñado para funcionar sin personal humano en entornos de alto tránsito como aeropuertos, universidades o estaciones. Trabaja 24/7, requiere solo reposición diaria de insumos y puede instalarse con facilidad bajo un modeloplug and play (enchufe y use).
“Desarrollamos un sistema de control que hace que el robot ‘dialogue’ con cada equipo y ejecute acciones en tiempo real. Es ingeniería, pero también coreografía”, explicó a TN Tecno Mariano Kot, Licenciado en Informática de la Universidad de Palermo y CEO de la startup.
El primer robot barista de la región
“Queríamos que la robótica saliera del entorno fabril, que deje de ser algo exclusivo de las líneas de producción industriales”, expresó Kot. “La idea surgió de una obsesión: ¿cómo hacemos para que el público general experimente la precisión y eficiencia de un robot, pero en algo tan cotidiano como tomar un café?”
Con esa premisa como objetivo, el robot fue ideado para replicar la calidad de una cafetería de especialidad, pero con velocidad, consistencia y sin margen de error. “Desde el principio nos propusimos usar máquinas profesionales, las mismas que un barista humano”, contó Kot. El resultado es una bebida hecha con la misma receta, el mismo procedimiento y en el mismo tiempo, siempre.
Pero además de ser preciso, el robot barista busca generar una experiencia memorable. “Buscamos una experiencia. Que alguien se acerque, mire con asombro cómo un robot le prepara el café y además lo disfrute. Si no está rico, no sirve”, afirmó el CEO. Y esa experiencia parece estar lograda: “Uno de los principales influencers de café en Argentina se emocionó cuando vio que el robot dibujaba un corazón sobre su latte. Esas reacciones nos confirman que vamos bien”.
Detrás de esa experiencia automatizada hay un trabajo multidisciplinario. Además de Kot, sus socios Guido Trenti, Chief Technology Officer y especialista en programación, y Leonardo Kot, Chief Design Officer, responsable de crear una interfaz visual atractiva y una experiencia de usuario intuitiva, trabajan para afinar detalles del pre-lanzamiento y cerrar los primeros acuerdos con cadenas gastronómicas, universidades y espacios de alto tránsito.
El objetivo es ambicioso, pero claro: que cualquier persona pueda pedir un café a un robot, disfrutarlo en menos de dos minutos y llevarse una experiencia que combine lo mejor del café de especialidad con lo último en automatización.
“Esto recién empieza”, concluyó Mariano Kot. La interacción cotidiana entre humanos y robots no es ciencia ficción. Está ocurriendo. Y en este caso, empieza con una buena taza de café.
tn