Un chofer de la Línea 5 sintió un malestar mientras conducía
La unidad quedó en doble fila y con el motor encendido en la calle Virgen de la Merced, al 500, mientras el trabajador ingresaba al Instituto de Cardiología solicitando ayuda.
En la ciudad de San Miguel de Tucumán, un suceso inesperado tuvo lugar en Virgen de la Merced al 500, un punto de intersección conocido por su concurrencia. El incidente ocurrió cuando un chofer de la línea 5, al sentirse descompensado, tomó la decisión de detener la marcha del colectivo de manera brusca. Con el propósito de buscar asistencia médica, el conductor descendió del vehículo e ingresó a la guardia del Centro Privado de Cardiología, dejando a los pasajeros en una situación inesperada.
El colectivo, que quedó estacionado en doble fila, activó las luces de baliza y mantuvo el motor encendido, lo que generó una serie de inconvenientes en el tránsito de la zona. Ante la sorpresiva circunstancia, los pasajeros optaron por descender del vehículo y proseguir con su rutina diaria, enfrentándose a la necesidad de buscar alternativas para continuar su viaje. Los testigos del evento informaron que el chofer permanecía en el centro de salud, recibiendo la atención necesaria.
A pesar de la emergencia, el colectivo ha permanecido mal estacionado durante más de 40 minutos, situación que ha provocado un considerable caos en el tráfico de la calle. La acumulación de vehículos y la falta de una pronta respuesta por parte de la empresa de transporte han contribuido a la congestión en esta vía, lo que resalta la importancia de contar con protocolos claros para manejar este tipo de incidencias.
Este incidente, aunque desafortunado, pone de manifiesto la complejidad de la logística en el transporte urbano y la necesidad de una respuesta eficaz que garantice tanto la salud de los conductores como la fluidez del tránsito en las calles de la ciudad.
